Archivo diario: 5 octubre, 2011

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En la peluqueria…, originalmente cargada por rutroncal.

Cuántas veces nos hemos dicho que no tenemos tiempo para nosotr@s mism@s,…. que no tenemos ni un minuto para ir a la peluquería, ir al gimnasio o dedicarnos tiempo para descansar, relajarnos o simplemente hacer lo que nos guste…

Hoy he ido a la peluquería y es tan importarte mimarnos y «regalarnos» algo… no nos damos cuenta de cuán importantes son esos pequeños detalles con nosotr@s mism@s, porque ¿si no los tenemos nosotr@s para nos, quién nos los dará? la automotivación depende de uno mism@…. somos como la pequeña flor del cuento de Rosa María Roé que os pongo a continuación, se titula La Rosa Blanca.

En un jardín de matorrales, entre hierbas y maleza, apareció como salida de
la nada una rosa blanca. Era blanca como la nieve, sus pétalos parecían de
terciopelo y el rocío de la mañana brillaba sobre sus hojas como cristales
resplandecientes. Ella no podía verse, por eso no sabía lo bonita que era.
Por ello pasó los pocos días que fue flor hasta que empezó a marchitarse
sin saber que a su alrededor todos estaban pendientes de ella y de su
perfección: su perfume, la suavidad de sus pétalos, su armonía. No se daba
cuenta de que todo el que la veía tenia elogios hacia ella.
Las malas hierbas que la envolvían estaban fascinadas con su belleza y
vivían hechizadas por su aroma y elegancia.

Un día de mucho sol y calor, una muchacha paseaba por el jardín pensando
cuántas cosas bonitas nos regala la madre tierra, cuando de pronto vio una
rosa blanca en una parte olvidada del jardín, que empezaba a marchitarse.

–Hace días que no llueve, pensó – si se queda aquí mañana ya estará
mustia. La llevaré a casa y la pondré en aquel jarrón tan bonito que me
regalaron.
Y así lo hizo. Con todo su amor puso la rosa marchita en agua, en un lindo
jarrón de cristal de colores, y lo acercó a la ventana.- La dejaré aquí,
pensó –porque así le llegará la luz del sol. Lo que la joven no sabía
es que su reflejo en la ventana mostraba a la rosa un retrato de ella misma
que jamás había llegado a conocer.

-¿Esta soy yo? Pensó. Poco a poco sus hojas inclinadas hacia el suelo se
fueron enderezando y miraban de nuevo hacia el sol y así, lentamente, fue
recuperando su estilizada silueta. Cuando ya estuvo totalmente restablecida
vio, mirándose al cristal, que era una hermosa flor, y pensó: ¡¡Vaya!!
Hasta ahora no me he dado cuenta de quién era, ¿cómo he podido estar tan
ciega?
La rosa descubrió que había pasado sus días sin apreciar su belleza. Sin
mirarse bien a sí misma para saber quién era en realidad.
Si quieres saber quién eres de verdad, olvida lo que ves a tu alrededor y
mira siempre en tu corazón.

Y ahora vosotr@s, ¿os habéis mirado al espejo y os habéis dicho cosas bonitas?


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Suplicando un sitio en el sofá, originalmente cargada por rutroncal.

Plegaria de un perro (autor desconocido)

Dame un pan, y yo te daré amo mío, toda mi lealtad.
Si sabes del dolor de la vida y tu corazón sangra silencioso,
yo me acercare humildemente a ti, y como no sé hablar,
moveré mi cola y lameré tus manos extendidas al desaliento.
Vive seguro de tu heredad, de tu casa,
de tu rancho lejano de la montaña,
porque han de matarme primero antes de permitir que nadie coja lo tuyo.
Si otro amo como tú,
quisiera llevarme consigo,
no le obedeceré y si me violenta,
huiré de su lado y te buscare a través del mundo.
Llévame contigo, de caza, a la mina, a la montaña,
a tu trabajo o a la guerra y pondré mis fuerzas,
mi astucia, mi valor y mi vida, para servirte hasta el fin.
Cuando velo tu sueño en las noches calladas
y con mi oído en tierra advierto algo extraño,
aúllo largamente para prevenirte el mal.
No me abandones jamás. Que si la vida te falta, iré a morir a tus pies.
Si me castigas, lameré tus manos.
Si me hieres, aullaré largamente del dolor antes de atacarte,
porque eres para mi más que un rey.
Y si mañana mueres tú en el desierto o en la guerra,
lloraré a tu lado hasta morir también.

Obtenido de http://www.conciencia-animal.cl/paginas/temas/temas.php?d=659


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¿Quien dijo sueño?, originalmente cargada por rutroncal.

El sueño de Gerardo Diego

Apoya en mí la cabeza,
si tienes sueño.
Apoya en mí la cabeza,
aquí, en mi pecho.
Descansa, duérmete, sueña,
no tengas miedo,
no tengas miedo al mundo,
que yo te velo.
Levanta hacia mí los ojos,
tus ojos lentos,
y ciérralos poco a poco
conmigo dentro;
ciérralos, aunque no quieras,
muertos de sueño.
Ya estás dormida. Ya sube,
baja tu pecho,
y el mío al compás del tuyo
mide el silencio,
almohada de tu cabeza,
celeste peso.
Mi pecho de varón duro,
tabla de esfuerzo,
por ti se vuelve de plumas,
cojín de sueños.
Navega en dulce oleaje,
ritmo sereno,
ritmo de olas perezosas
el de tus pechos.
De cuando en cuando una grande,
espuma al viento
suspiro que se te escapa
volando al cielo,
y otra vez navegas lenta
mares de sueño,
y soy yo quien te conduce,
yo que te velo,
que para que te abandones
te abrí mi pecho.
¿Qué sueñas? ¿Sueñas? ¿Qué buscan
-palabras, besos-
tus labios que se te mueven,
dormido rezo?
Si sueñas que estás conmigo,
no es sólo sueño;
lo que te aúna y te mece
soy yo, es mi pecho.

Despacio, brisas, despacio,
que tiene sueño.
Mundo sonoro que rondas,
hazte silencio,
que está durmiendo mi niña,
que está durmiendo
al compás que de los suyos
copia mi pecho.
Que cuando se me despierte
buscando el cielo
encuentre arriba mis ojos
limpios y abiertos.


Una de las cosas más importantes para ser más inteligentes a nivel emocional, es tener claro el triángulo H.O.S., que representa el Hecho, la Opinión y el Sentimiento que cada persona experimenta de cada situación.
Frente a cada situación o experiencia que vivimos, hay para cada persona 3 elementos que nos afectan, estos son:
– El hecho.- como la descripción objetiva de lo sucedido, visto y/o vivido, como si fuéramos un observador que relatara la escena tal cual la está viendo sin aportar ninguna inferencia y/o suposición.
– La opinión.- la interpretación del hecho, es decir, lo que pensamos acerca de lo que nos ha sucedido, hemos visto y/o hemos vivido y que es nuestra visión subjetiva del hecho.
– El sentimiento.- la emoción que viene generada por la interpretación del hecho y que hace que tanto la opinión como el sentimiento estén vinculados pues según la opinión podemos aumentar la intensidad de la emoción asociada.
Lo más difícil es separar el hecho de la opinión, y tendemos a utilizar nuestra opinión como si fuera un hecho utilizándolo para conversar, relacionarnos e incluso para argumentar en un conflicto.
En el momento en el que utilizamos nuestra opinión para interaccionar con nuestro entorno (sobre todo si no indicamos previamente que es nuestra opinión la que aportamos) nos ponemos en posición de jueces, por encima de nuestro interlocutor, por lo que automáticamente nuestro interlocutor va a ponerse en guardia, reaccionando o bien en la defensa o bien en el ataque al comentario que realicemos.
Hay que aprender a describir los hechos, porque es en lo que seguro vamos a estar de acuerdo dos personas y desligamos la situación a la emoción, evitando la mayor parte de los conflictos.
¿Y a vosotr@s qué tal se os da diferenciar el hecho de la opinión? ¿lo ponemos en práctica?

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


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